Dado que los niños y niñas aún forman parte de la población no vacunada contra COVID-19, la variante Delta resulta un peligro latente ya que en ellos es más transmisible.

De acuerdo con Leana Wenn, doctora y analista de CNN, “Las personas no vacunadas tienen incluso más probabilidades de infectarse con la variante delta que cualquiera de las otras variantes que hemos visto hasta ahora durante la pandemia”.

Por ello, compartió algunos puntos que los padres deben tener en cuenta para proteger a sus hijos de esta variante. 

1.- Si bien no es necesario que los niños usen mascarillas todo el tiempo en espacios abiertos que cumplan con las condiciones de seguridad y distanciamiento social, al interior lo más recomendable es permitir que tengan contacto cercano sólo con personas vacunadas.

2.- Si una persona no se ha aplicado la vacuna COVID-19, entonces es fundamental que los menores usen cubrebocas.

3.- De igual forma deben estar separados por lo menos a dos metros de distancia al desarrollar actividades en espacios cerrados y mientras comen pueden no usar la mascarilla siempre y cuando el lugar esté sanitizado y se cuenten con medidas de prevención.

4.- En caso de niños mayores de 12 años en espacios con personas de vacunación mixta, es decir que se hayan inoculado con diferentes tipos de vacuna, los menores deberán portar cubrebocas siempre que estén en espacios interiores.

¿Funcionan las vacunas COVID-19 contra la variante Delta?

La Dra. mencionó que las actuales vacunas COVID-19 parecen funcionar contra la variante Delta, pero dado que los menores de edad en casi ningún país del mundo están recibiendo el tratamiento, su contagio supondría un grave peligro.

FOTO: FERNANDO CARRANZA GARCIA / CUARTOSCURO.COM

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